Lograr establecer relaciones causales en sociología dista bastante de ser un problema trivial. El estudio de lo social se distancia de otras ciencias en términos de la dificultad –y en muchos casos, imposibilidad- de intervenir su unidad de estudio. En sociología resulta prácticamente imposible realizar estudios de laboratorio o experimentos, y en general, el método que predomina es el de los estudios observacionales, especialmente la encuesta. De esta manera, en la mayoría de los casos, la causalidad termina siendo definida utilizando métodos estadísticos, como la correlación o modelos de regresión. Otros métodos más avanzados, como los modelos de ecuaciones estructurales, el análisis factorial, entre otros, han permitido desarrollar la estadística y mejorar los modelos explicativos en la sociología. Sin embargo, como afirman Pötter y Blossfeld (2001), esta sofisticación de la estadística también ha tendido a separar la estadística del resto de la investigación social. Existe consenso entre sociólogos con respecto a que la causalidad no puede derivarse simplemente de datos empíricos, sino que debe estar siempre vinculada a la teoría.
Gerber, M. (2008). La problemática de la causalidad en la Sociología. Algunas reflexiones. Revista Némesis, (6), 105–111. Recuperado a partir de https://anales.uchile.cl/index.php/RN/article/view/66616